Publicada en JAMA Network Open
Recientemente se ha publicado en JAMA Network Open una revisión sistemática y metaanálisis sobre la asociación de las mayores fuentes alimentarias de fructosa con la incidencia de síndrome metabólico.
Las bebidas azucaradas se asocian con un aumento del riesgo de síndrome metabólico. Sin embargo, sigue sin estar tan claro el papel de otras fuentes alimentarias de azúcares que contienen fructosa en el desarrollo del síndrome.
El objetivo de esta revisión sistemática y metaanálisis ha sido el de examinar la asociación de las principales fuentes alimentarias de azúcares que contienen fructosa con la incidencia de síndrome metabólico.
Para ello, se realizaron búsquedas en las fuentes de datos MEDLINE, Embase y Cochrane Library desde el inicio de la base de datos hasta el 24 de marzo de 2020, además de búsquedas manuales en las listas de referencias de los estudios incluidos mediante los siguientes términos de búsqueda: bebidas azucaradas, bebida de fruta, yogur, síndrome metabólico y estudio prospectivo.
En cuanto a los criterios de selección e inclusión de estudios, se incluyeron los estudios prospectivos de un año o más que investigaron la asociación de importantes fuentes alimenticias de azúcares que contienen fructosa con el incidente de síndrome metabólica en participantes libres del mismo al comienzo del estudio.
La calidad del estudio se evaluó utilizando la escala de Newcastle-Ottawa. Las estimaciones de riesgo de cuantiles extremos para cada fuente de alimentos con incidencia del síndrome metabólico se agruparon utilizando un meta-análisis de efectos aleatorios. Se evaluó la heterogeneidad de los estudios (estadística Cochran Q) y se cuantificó (estadística I2). Los análisis de dosis-respuesta se realizaron utilizando un modelo lineal de efectos mixtos de una etapa. La certeza de las pruebas se evaluó mediante el uso de GRADE (Grade of Recommendations, Assessment, Development, and Evaluation). Los resultados se comunicaron de acuerdo con las directrices de presentación de informes de MOOSE (Meta-analyses Of Observational Studies in Epidemiology) y PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses).
Se incluyeron trece estudios prospectivos (4.951 participantes - edad media: 51 años; rango, 6-90 años; 14.205 con síndrome metabólico) que evaluaron 8 alimentos que contenían fructosa y su incidencia sobre el síndrome metabólico.
El análisis encontró una asociación dosis-respuesta lineal adversa para las bebidas azucaradas (RR para 355 mL/d, 1,14; IC del 95%, 1,05-1,23) y una asociación dosis-respuesta protectora en forma de L para el yogur (RR para 85 g/d, 0,66; IC del 95%, 0,58-0,76) y la fruta (RR para 80 g/d, 0,82; IC del 95%, 0,78-0,86).
En cuanto a los zumos de fruta (mezclas y 100%) encontraron una asociación dosis-respuesta en forma de U con protección en dosis moderadas (mezclas de zumo de fruta: RR para 125 mL/d, 0,58; IC del 95%, 0,42-0,79; 100% de jugo de fruta: RR para 125 mL/d, 0,77; IC del 95%, 0,61-0,97).
En el caso de la miel, el helado y los productos de pastelería no se asociaron con la incidencia de síndrome metabólico. Si bien es verdad que la certeza de la evidencia fue moderada para las bebidas azucaradas, el yogur, la fruta y el zumo de fruta y muy bajo para todas las demás fuentes de alimentos.
Las conclusiones de esta revisión sistemática y metaanálisis sugieren que la asociación entre bebidas azucaradas y síndrome metabólico no se extiende a otras fuentes alimenticias de azúcares que contienen fructosa con una asociación protectora para el yogur y la fruta en todo el rango de dosis y para el zumo de fruta en dosis moderadas. Por lo tanto el análisis sugiere que las políticas y directrices actuales sobre la necesidad de limitar las fuentes de azúcares libres necesitarían ser reexaminadas.