José Jordao, presidente de AIJN
El presidente de AIJN, José Jordao, explica cuáles son los principales retos y amenazas del sector del zumo en Europa, la manera en la que se está respondiendo a las críticas recibidas por parte de los medios de comunicación, el Código Profesional o el papel de la RSC en el sector.
Pregunta.- ¿Cuáles son las oportunidades y amenazas para el desarrollo dinámico del sector en Europa?
José Jordão- En la Juice Summit celebrada en Amberes en octubre 2017, anuncié unas cifras bastante preocupantes con respecto a lo acontecido en el sector durante la última década: el consumo se ha visto reducido en más de mil millones de litros, y hemos perdido unos 3,3 mil millones de euros en ventas. Es muchísimo zumo y muchísimo dinero como para dejar que pase desapercibido.
AIJN necesita desarrollar un enfoque y un proceso estratégicos acerca del futuro del sector, y establecer unos objetivos claros que, si se cumplen, lograrán sacar al sector del zumo de la actual situación de crisis para encaminarlo de nuevo hacía el desarrollo y la expansión.
Las circunstancias actuales del sector del zumo exigen un diálogo detallado y urgente entre sus socios y miembros para conseguir superar los retos que tenemos por delante. Creo firmemente que tenemos que plantearnos la finalidad de triunfar, con un doble objetivo: 1) Conseguir que el sector del Zumo vuelva a ser creíble y respetado, y que el zumo se perciba de nuevo como un producto sano; 2) Restablecer el consumo y el crecimiento, tanto en la UE como en cada país miembro. Para conseguir estas metas, creo que es más importante conseguir que los consumidores vuelvan a la categoría mediante nuevas propuestas de valor añadido, que recuperar el volumen que hemos perdido.
El sector tiene que plantear cómo lograr estos objetivos. Sobre todo, tenemos que ser capaces de innovar para captar a nuevos consumidores y recuperar la confianza de los que han abandonado la categoría. Por todo esto, AIJN, como representante del sector del zumo en la Unión Europea, ha reunido a todos los países miembros para que trabajemos juntos.
P.- El sector tiene que responder a las críticas recibidas por el contenido de azúcar de sus productos. ¿Qué solución ha buscado AIJN para afrontar esta situación?
J.J.- El sector del zumo no supo defender su buen estado de salud, y como consecuencia se encuentra ahora en una situación delicada. Uno de los mayores problemas fue que, durante bastante tiempo, no pudo responder a los medios internacionales, que influyeron de manera profunda y dañina en los líderes de opinión.
El sector aceptó sin querer la merma de su credibilidad entre los redactores de las guías alimentarias, dejándose abierto y sin posibilidades de defenderse ante los ataques sobre la imposición a los que se enfrenta en muchos países europeos. Una de las razones por las que nuestros productos han sido rechazados por un gran porcentaje de consumidores es su contenido de azúcar, un impedimento importante.
La buena noticia es que estamos luchando para cambiar esto. En primer lugar, estamos cada vez más preparados para restaurar el equilibrio a un diálogo desigual con las autoridades y los profesionales sanitarios. De eso trata el programa de Zumo de Fruta en Serio, mediante el que se trabajan 3 pilares fundamentales:
En primer lugar, tenemos que frenar en su origen la imagen sesgada que se tiene sobre este alimento antes de afrontar la problemática de los consumidores mal informados sobre lo que es el zumo de fruta.
Y segundo, pero no menos importante, debemos conseguir el respaldo científico necesario para devolver al sector del zumo a un lugar preferente. Zumo de Fruta en Serio ha incidido mucho en los nuevos estudios que el Panel Científico de Expertos (PCE) está llevando a cabo. El Panel está compuesto por seis científicos procedentes de Europa, Canadá, Brasil y Estados Unidos.
Pero como sabemos, es un proceso dilatado, así que los profesionales del sector (empresas embotelladoras y envasadoras, y los proveedores de fruta) tienen que ser pacientes para luego recibir las buenas noticias fruto de las investigaciones actuales. Los primeros resultados confirman que la mayoría de los estudios realizados con anterioridad no distinguían entre zumos y otras bebidas azucaradas, lo que llevó a sacar conclusiones erróneas sobre los peligros del contenido de azúcar de los zumos de fruta. Confiamos en que los estudios del PCE están a punto de cambiar todo eso. Nuestras investigaciones están próximas a revelar nuevas evidencias sobre los beneficios que proporcionan los zumos de fruta. Estas conclusiones positivas se encuentran en la fase de revisión para su posterior publicación en revistas científicas acreditadas. Transmitirán mensajes muy importantes para los consumidores, y servirán de sustento para situar al sector en un nivel mucho más favorecido para poder consolidar una relación más a la par con las autoridades y los profesionales sanitarios.
En tercer lugar, y posiblemente lo más decisivo, es la consulta pública de la EFSA sobre azúcares. Su enfoque, basado en los azúcares libres según la definición de la OMS-Europa, es el propósito de esta evaluación. La EFSA interpreta este mandato como una reclamación de asesoramiento científico acerca de la ingesta diaria de azúcares libres procedentes de todas las fuentes alimentarias.
Al señalar el azúcar como un compuesto aislado, el enfoque de la EFSA es injustificable y altamente perjudicial para los zumos. Lo que pretendemos refutar con el apoyo de la evidencia científica es la práctica de agrupar todos los contenidos de azúcar, presentes tanto de forma natural como añadidos, en todas las fuentes alimentarias. AIJN se compromete a trabajar para cambiar esta perspectiva, que consideramos equivocada, y rebatirla basándonos en nueva evidencia científica procedente de meta-análisis, con el apoyo adicional de mega-cohortes y ensayos controlados aleatorios. Las conclusiones son unánimes al confirmar la importancia de los compuestos bioactivos, y apuntan a que el consumo de alimentos enteros e integrales y una dieta variada reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Los marcadores médicos de los estudios del PCE también respaldan lo que afirman cada vez más estudios científicos, que un compuesto aislado de un alimento no influye en la salud de la misma manera que el alimento entero. Por tanto, estudiar el azúcar como un elemento aislado no es la mejor manera de abordar la evaluación de la EFSA.
En AIJN, estamos decididos a demostrar esto. Tenemos que ser convincentes, y volver a encaminar el debate a nuestro favor antes de 2020. Por ello, sigo siendo optimista sobre la posibilidad de revertir esta tendencia negativa y recuperar la credibilidad del sector como una herramienta indispensable para el éxito.
P.- Se ha publicado recientemente el Código Profesional. ¿Qué le impulsó a escribirlo?
J.J.- El Código Profesional no es nuevo. Fue creado a petición del Consejo mediante la “Directiva 89/394/CEE de 17 de junio de 1989 por la que se modifica por tercera vez la Directiva 75/726/CEE relativa a la aproximación de las legislaciones de los Estados Miembros sobre los zumos de frutas y otros productos similares”, dejando en manos del sector de zumos de fruta de la UE la responsabilidad de determinar las características analíticas y microbiológicas del producto, y de cumplir con todo reglamento, incluyendo los métodos analíticos necesarios para controlar la composición y producción de los zumos de fruta.
Incluye varios documentos aún en fase de debate, como Norovirus y Hepatitis A en zumos de fruta y productos afines. El Código Profesional define valores no incluidos en la legislación europea ni en el Codex Alimentarius. Fue desarrollado y está mantenido y actualizado por expertos internacionales gubernamentales y no gubernamentales en varios campos, y ha sido adoptado en todo el mundo por más de 250 autoridades de inspección y control de alimentos, productores de materias primas y empresas embotelladoras (en Venezuela, Sudáfrica, Filipinas y Rusia, entre otros).
P.- ¿Qué significa la RSC para el sector del zumo, y qué puede hacer AIJN para apoyarla?
J.J.- Al ser un negocio global, el sector del Zumo en la UE está comprometido con la RSC. La Industria Europea de Zumos de Frutas, representada por AIJN, acepta la responsabilidad de asegurar que las operaciones del sector influyan de forma positiva en la sociedad y el medio ambiente. Uno de los compromisos de nuestro sector es el de
asegurar la procedencia responsable de las materias primas que utilizamos para producir nuestro zumo.
AIJN ha creado tres iniciativas clave para respaldar nuestro compromiso:
Código de Conducta Comercial
AIJN y sus organizaciones miembros han desarrollado y aprobado el Código de Conducta Comercial basándose en los Principios del Sector Agroalimentario del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, y en los principios universales de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, los convenios fundamentales de la OIT, las Convenciones y Normas de las Naciones Unidas, y otras normas de aceptación internacional. La finalidad de este Código es asegurar que todos los actores en la cadena de valor de los zumos de fruta obren acorde a los valores mínimos sobre derechos humanos, trabajo y medio ambiente reconocidos en el ámbito global.
JuiceCSR, la plataforma RSC del sector de los zumos
Para reforzar las iniciativas del sector en el ámbito de la sostenibilidad, AIJN desarrolló Juice CSR (www.juicecsr.eu), la plataforma de RSC del sector creada inicialmente con el apoyo y financiación parcial de la Comisión Europea. La Plataforma es una iniciativa promovida por múltiples actores, incluidos los proveedores de la materia prima, empresas embotelladoras y envasadoras, minoristas y ONGs, con el objetivo de mejorar el entendimiento de la RSC dentro del sector, además de compartir y fomentar las buenas prácticas.
Sistema Independiente de Control de Calidad
Durante más de 25 años, la Industria Europea de Zumos de Frutas ha trabajado con un sistema independiente de control de calidad que certifica a los proveedores y procesadoras de materias primas en todo el mundo, verificando la autenticidad de dichas materias primas. SGF International, el organismo de control que extiende la certificación, realiza inspecciones en más de 60 países en todo el mundo y certifica a más de 400 proveedores, abarcando la mayoría de la materia prima que se utiliza en la industria de zumos de fruta de la Unión Europea. El cumplimiento del Código de Conducta Comercial de AIJN es una condición indispensable para la obtención de la certificación SGF.
Todas estas iniciativas son complementarias a los códigos laborales que existen en cada país productor y proveedor, que están apoyados a su vez por los convenios colectivos y prácticas voluntarias de cada empresa. AIJN apoya estas acciones plenamente, y se compromete a trabajar para conseguir una mayor transparencia y compromiso en todo el sector.