Un envase monodosis de 200 a 300 ml o un vaso de zumo de fruta, representa una de las cinco raciones diarias de fruta que se deben consumir en el marco de una alimentación equilibrada
Cumplir con las normas que conlleva una dieta equilibrada puede no resultar fácil debido a la variedad y calidad de los alimentos que existen hoy en día a disposición de los consumidores. Además, a la comida hay que añadirle la bebida que acompañe a los alimentos que ingerimos y en la actualidad la decisión es compleja por todas las posibilidades que hay. Desde Asozumos estamos convencidos de que la incorporación de zumos a nuestra dieta diaria puede contribuir aportando gran cantidad de los nutrientes procedentes de la fruta de la que proviene y contribuyendo, además, a la hidratación del organismo.
El propio comité científico de la organización 5 al Día reconoce que los zumos de frutas contribuyen como una de las cinco raciones recomendadas a diario. Al mismo tiempo, la Organización Mundial de la Salud recomienda ingerir dos litros de líquido en nuestro organismo cada día, lo que significaría que tendríamos que beber 730 litros por persona y año. Al hilo de estas afirmaciones, en España se consumen aproximadamente 101 litros de agua envasada por persona cada año, y otros 84 de leche, complementados con 86 litros de bebidas refrescantes y 46 litros por persona de cerveza.
El consumo de bebidas calientes como tés, cafés o infusiones es de unos 40 litros anuales y el de zumos, de unos 20 litros anuales, asismismo representan unos 20 litros por habitante y año y las bebidas espirituosas otros 2,3. Todas estas cifras suman unos 400 litros, cantidad que dista bastante de los 730 litros totales, y que se justifica por la ingesta de agua corriente o de grifo en aquellas zonas donde esta es apta para el consumo. Si cumpliéramos con las recomendaciones de la OMS, estos datos ofrecen a determinadas bebidas, cuyo consumo es todavía bajo, como por ejemplo, los zumos, un potencial de crecimiento en su consumo per cápita muy importante.
Por este motivo, desde Asozumos trabajamos para fomentar unos hábitos de consumo saludables e informar a los consumidores sobre el papel de los zumos de fruta en una dieta sana y equilibrada, siempre desde el rigor científico tratando de desmitificar falsas creencias que a veces existen con relación a estos productos.
La importancia del zumo en el desayuno
Además, los zumos de frutas comerciales se pueden tomar en cualquier momento del día y del año y gracias a ellos podemos disponer de todos los sabores, a cualquier hora y en cualquier estación. Es importante destacar, por ejemplo, el papel que tienen los zumos de fruta en un desayuno saludable. Esta comida debe aportar el 25% de la energía a ingerir durante todo el día y debería contener hidratos de carbono, proteínas y grasas, acompañado de una buena dosis de alimentos con fibra. Para que un desayuno sea equilibrado debe contener por lo menos, lácteos, aceites de oliva, pan, cereales, frutas o sus derivados y frutos secos.
En concreto, los zumos de frutas comerciales, gracias a sus propiedades nutritivas y sus diferentes beneficios para la salud, son el aliado perfecto para hacer frente a las largas jornadas diarias de niños y adultos. Un vaso de zumo de frutas en el desayuno supone el aporte de una buena parte de las vitaminas, minerales y antioxidantes que necesita el organismo cada mañana proporcionando la vitalidad y energía imprescindibles para afrontar las jornadas diarias.
El zumo en la merienda de los más pequeños
Pero además, cada vez resulta más común que los niños tomen un zumo comercial a la hora de la merienda, cuando salen del colegio o en el recreo. Se trata de un modo práctico y nutritivo de asegurarnos que los más pequeños de la casa tomen fruta líquida y recuperen fuerzas después de todo el día estudiando. Asimismo, beber un envase monodosis de 200 a 300 ml de zumo de frutas en la merienda representa una de las cinco raciones diarias de fruta recomendadas dentro de una alimentación equilibrada. De esta manera se consigue que los más pequeños de la casa ingieran fácilmente los nutrientes y vitaminas de las frutas para garantizar una buena salud y un crecimiento óptimo.
El zumo en los adultos y mayores
Hablamos de los más pequeños, pero no hay que olvidarse de las largas jornadas laborales de los adultos y la necesidad de aportar al organismo diferentes nutrientes que nos ayuden a reponer energía y paliar el cansancio de la jornada. Gracias a los zumos de frutas podemos aportar a nuestro organismo los nutrientes de estas, que de otra manera no tomaríamos tan a menudo, como por ejemplo, las frutas tropicales, las bayas del bosque o las que están fuera de temporada. En personas de avanzada edad, una ración de zumo de frutas puede suponer la ingesta de fruta necesaria ya que debido a problemas dentales y digestivos consumir piezas de fruta se hace más complicado que ingerir un zumo de frutas más sencillo, cómodo y rápido.
Su variedad de sabores y facilidad de ingesta garantizan su adecuación a cualquier consumidor y su perfecta armonía con cualquier otro alimento. Incluir zumo, por ejemplo de naranja, en el desayuno aporta vitamina C y antioxidantes entre otros nutrientes. Además, hay diversas opciones a la hora de elegir un zumo y este tipo de productos dan la oportunidad de consumir diferentes tipos de frutas de manera sencilla, deliciosa y rápida.